El champagne ó Champán es una bebida que simboliza la celebración, el lujo y la elegancia. Pero no todos los champagnes son iguales, ni se adaptan a todos los gustos y momentos. Por eso, es importante saber cómo elegir el mejor champagne para cada ocasión, teniendo en cuenta sus características, su calidad y su precio. En este articulo te ofrecemos algunos consejos y recomendaciones para que aciertes con tu elección y disfrutes al máximo de esta bebida tan especial.
Índice de contenidos
- ¿Qué es el champagne?
- Tipos de champagne
- Cómo leer la etiqueta de un champagne
- Cómo servir y degustar el champagne
- Cómo maridar el champagne
- Algunos champagnes recomendados
¿Qué es el champagne o Champán?
El champagne es un tipo de vino espumoso que se produce exclusivamente en la región de Champagne, en el noreste de Francia. Se elabora mediante el método tradicional o champenoise, que consiste en una segunda fermentación en botella, donde se genera el gas carbónico que le da las burbujas. El champagne se elabora principalmente con tres variedades de uva: pinot noir, pinot meunier y chardonnay, que pueden combinarse de diferentes formas o usarse por separado.
El champagne es una denominación de origen protegida, lo que significa que solo se puede llamar así al vino espumoso que cumpla con una serie de requisitos de calidad, origen y elaboración. Por eso, no todos los vinos espumosos son champagnes, aunque se parezcan. Hay otras denominaciones de origen de vinos espumosos, como el cava, el prosecco o el crémant, que tienen sus propias características y métodos de elaboración.
Tipos de champagne
Existen diferentes tipos de champagne, según las uvas utilizadas, el nivel de azúcar, el tiempo de crianza o la añada. Estos son algunos de los más comunes:
- Blanc de blancs: se elabora solo con uva blanca, normalmente chardonnay. Es un champagne fresco, ligero y delicado, con aromas florales y cítricos. Ideal para el aperitivo o para acompañar mariscos y pescados.
- Blanc de noirs: se elabora solo con uva tinta, normalmente pinot noir o pinot meunier. Es un champagne más intenso, estructurado y complejo, con aromas a frutos rojos y especias. Ideal para platos de carne, quesos o postres.
- Rosé: se elabora mezclando vino blanco y vino tinto, o macerando las uvas tintas con el mosto. Es un champagne afrutado, elegante y versátil, con aromas a fresas, frambuesas o cerezas. Ideal para todo tipo de platos, desde el aperitivo hasta el postre.
- Brut: se elabora con un nivel de azúcar inferior a 12 gramos por litro. Es el tipo de champagne más seco y el más consumido. Tiene un sabor equilibrado, fresco y armonioso. Ideal para cualquier ocasión y cualquier plato.
- Extra brut: se elabora con un nivel de azúcar inferior a 6 gramos por litro. Es un tipo de champagne muy seco y muy puro, que expresa la esencia del terruño y de las uvas. Ideal para los paladares más exigentes y para maridar con ostras, caviar o sushi.
- Demi-sec: se elabora con un nivel de azúcar entre 32 y 50 gramos por litro. Es un tipo de champagne dulce y suave, que tiene un sabor goloso y seductor. Ideal para los postres, especialmente los de chocolate, frutas o cremas.
- Vintage: se elabora con uvas de una sola cosecha, que se considera excepcional por su calidad. Es un tipo de champagne que tiene una crianza mínima de tres años y que refleja el carácter de un año concreto. Ideal para los amantes de los champagnes con personalidad y complejidad.
- Non vintage: se elabora con uvas de diferentes cosechas, que se mezclan para conseguir un estilo propio y constante. Es el tipo de champagne más habitual y el que representa la identidad de cada casa productora. Ideal para los que buscan un champagne de confianza y versatilidad.