El Vino Tinto Protos Selección Grajo Viejo es la máxima expresión del terroir de Bodegas Protos. Este vino, elaborado con uvas Tempranillo de viñedos de más de 70 años, representa la exclusividad y la dedicación a la calidad que caracteriza a la bodega.
Color y Aroma de Protos Selección Grajo Viejo
Este vino presenta un profundo color rojo cereza con matices violáceos. En nariz, es elegante y complejo, con un abanico aromático que incluye fruta negra madura, violetas, y notas de roble tostado, toffee y chocolate negro. Estos aromas son el resultado de su meticulosa crianza en barricas de roble francés.
Sabor y Sensación en Boca de Protos Selección Grajo Viejo
En boca, este vino es sabroso, amplio y potente, con taninos finos y elegantes. La acidez bien equilibrada de estas viñas cultivadas en terrenos pobres aporta un nervio característico. Cada sorbo ofrece un sabor intenso de bayas rojas y negras, madera, vainilla y pimienta negra, culminando en un final largo y persistente.
Maridaje Perfecto de Protos Selección Grajo Viejo
Este vino es ideal para acompañar carnes asadas, carpaccios, chuletas de cerdo o cordero, guisos de carne o pescado, legumbres y quesos curados. Su complejidad y riqueza de sabor complementan a la perfección estos platos, creando una experiencia gastronómica inigualable. Disfrutar de una copa de Protos Selección Grajo Viejo es adentrarse en la esencia de la Ribera del Duero. Este vino ofrece una experiencia sensorial rica y equilibrada, perfecta para celebraciones especiales y momentos de disfrute pausado.
Es un vino que invita a la reflexión y a apreciar cada detalle de su complejidad.
Historia del Vino Protos Selección Grajo Viejo
Elaborado solo en añadas excelentes, este vino proviene de viñedos con más de 70 años de antigüedad. La vendimia se realiza manualmente en cajas de 20 kg y pasa por una doble mesa de selección. La maceración con hollejos y la fermentación se llevan a cabo en barricas francesas de 500 litros durante 26 días a 28ºC. La crianza se realiza durante 18 meses en roble francés nuevo, seguido de 12 meses en botella, asegurando así un vino de calidad excepcional y gran longevidad.